El nombre de Noé Peñaloza Hernández, empresario y exalcalde de San Martín Texmelucan, volvió a los reflectores públicos, esta vez no por su trayectoria política, sino por el cuantioso adeudo que arrastra su firma industrial, Cerámica Santa Julia, con el Ayuntamiento de Huejotzingo. La cifra: más de 10 millones de pesos, por concepto de uso de suelo, licencias, descargas residuales y multas acumuladas.
El presidente municipal Roberto Solís Valles confirmó que, aunque se ha recibido un pago inicial superior al millón de pesos —que apenas cubre cuatro de los 19 polígonos registrados—, la empresa aún está lejos de regularizar su situación. “Han mostrado voluntad, pero la deuda es pesada. Estaremos informando sobre avances hacia finales de esta semana”, declaró el edil.
Empresario reciclado: del poder municipal al negocio privado
Peñaloza no es un actor nuevo en los círculos del poder ni en el sector privado poblano. Militante del Partido Acción Nacional (PAN) durante buena parte de su carrera, ocupó la presidencia municipal de San Martín Texmelucan en dos ocasiones (1996-1999 y 2008-2011), periodos marcados por acusaciones de opacidad, favoritismo y contratos asignados sin licitación, aunque nunca enfrentó cargos penales.
Tras su segunda salida del poder local, consolidó un pequeño emporio empresarial vinculado a la producción de materiales de construcción, siendo Cerámica Santa Julia su buque insignia. La planta, ubicada en el polígono industrial de Huejotzingo, opera hornos de alta temperatura alimentados por gas, y ha expandido su huella en la zona sin que hasta ahora hubiera transparencia total sobre sus permisos ni su impacto ambiental.
Además de Santa Julia, Peñaloza ha tenido participación en al menos dos sociedades mercantiles más relacionadas con la distribución de materiales de obra y la renta de maquinaria pesada, según datos del Registro Público de Comercio. En 2017, un informe de la entonces Secretaría de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico (Secotrade) lo vinculó con proveedores que recibieron contratos por adjudicación directa en municipios gobernados por sus antiguos aliados.
Documentos públicos y actas de empresas
Según registros del Registro Público de Comercio del Estado de Puebla, Noé Peñaloza Hernández figura como autoridad en una entidad registrada con el número 621132005, con domicilio en San Martín Texmelucan. La entidad tiene una duración indefinida y su objeto social es la producción de bienes o servicios relacionados con la fabricación de muebles en general .
Además, se ha documentado que Cerámica Santa Julia no ha presentado permisos y pagos desde 2019, incluyendo licencias de funcionamiento, uso de suelo y descargas residuales . Esta omisión ha sido señalada por el alcalde de Huejotzingo, quien ha denunciado públicamente las irregularidades y la falta de cumplimiento por parte de la empresa.
El peso muerto de las viejas prácticas
Huejotzingo, por años rehén del crecimiento industrial sin planeación, se enfrenta ahora al reto de poner orden donde por décadas imperó la tolerancia institucional. En ese contexto, el caso Santa Julia ilustra el conflicto entre el interés público y los privilegios heredados del compadrazgo político-empresarial.
Aunque la empresa interpuso dos juicios de amparo —uno por el funcionamiento de sus hornos—, y logró que se permitiera el ingreso de 20 trabajadores para continuar operaciones mínimas, el alcalde Solís advirtió que el gobierno municipal no dará marcha atrás: “Nadie está por encima de la ley”.
La historia aún no se escribe por completo. Mientras las autoridades actualizan los polígonos en las 15 hectáreas ocupadas por la cerámica y sus bodegas, crece la expectativa sobre si el exalcalde convertido en empresario liquidará finalmente su deuda o si buscará prolongar, por medios legales, una impunidad construida desde el poder.
