Cabeza logo

header ads

Vinculan a proceso a Irene Olea, exalcaldesa de IzĂșcar, por intimidar a testigos en caso de periodistas torturadas

Vinculan a proceso a Irene Olea, exalcaldesa de IzĂșcar, por intimidar a testigos en caso de periodistas torturadas

Por José Herrera

17 de junio de 2025

La exalcaldesa de IzĂșcar de Matamoros, Irene Olea Torres, fue vinculada a proceso por el delito de intimidaciĂłn contra testigos protegidos en el caso de tortura y abuso sexual cometido contra las periodistas Natalie Hoyos y Michelle LĂłpez, hechos ocurridos en 2023.

La decisiĂłn fue tomada por el juez de control Jorge Eduardo RamĂ­rez TĂ©llez, tras la presentaciĂłn de pruebas sĂłlidas por parte de la FiscalĂ­a Especial para la AtenciĂłn de Delitos cometidos contra la Libertad de ExpresiĂłn (FEADLE), instancia perteneciente a la FiscalĂ­a General de la RepĂșblica (FGR).

Aunque tambiĂ©n se le imputaron delitos por falsificaciĂłn de documentos y declaraciones falsas —presuntamente con la intenciĂłn de encubrir a sus excolaboradores—, el juez desestimĂł estas acusaciones por insuficiencia probatoria en esta etapa procesal.

SegĂșn la carpeta de investigaciĂłn, Olea Torres habrĂ­a amenazado a varios testigos protegidos, advirtiĂ©ndoles que perderĂ­an su empleo si colaboraban con las autoridades federales. Entre ellos se encontraba Socorro Barrera, entonces policĂ­a municipal, quien fue asesinada el 20 de junio de 2024, crimen que, aunque aĂșn bajo investigaciĂłn, ha sido señalado por familiares como una represalia directa.

El juez ordenó dos meses de investigación complementaria, periodo en el que se definirå si la acusación se robustece o se cae. De ser encontrada culpable por el delito de intimidación, Irene Olea podría enfrentar una pena de uno a siete años de prisión.

Mientras tanto, las medidas cautelares se mantienen vigentes: la exalcaldesa tiene prohibido acercarse a las periodistas agredidas y a los testigos del caso.

Este proceso judicial pone nuevamente bajo el reflector el clima de violencia institucional y colusiĂłn polĂ­tica que persiste en algunos gobiernos municipales de Puebla, donde el ejercicio del poder ha sido utilizado no para proteger a los ciudadanos, sino para silenciar voces incĂłmodas.