Con las manos en el huachicol: Aseguran 21 mil litros de combustible en Huauchinango; detienen a presunto traficante
En el corazón de la sierra norte de Puebla, donde el silencio de los pinos encubre el rugir de los tractocamiones cargados de combustible ilícito, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) detuvieron a Roberto N., de 35 años, presunto operador del mercado negro de hidrocarburos.
La captura tuvo lugar sobre la carretera Tulancingo-Huauchinango, a la altura de la localidad de Texcapa, durante un patrullaje de rutina que terminó revelando una carga que huele a huachicol: 21 mil litros de combustible, sin documentación que acreditara su legal procedencia.
Roberto N., conductor del tráiler asegurado, no pudo presentar factura, remisión ni bitácora de carga, lo que levantó de inmediato sospechas entre los uniformados. Al inspeccionar el remolque, los agentes confirmaron el contenido sospechoso: un volumen equivalente al consumo mensual de una pequeña flotilla de transporte público.
La SSP puso al detenido a disposición de la autoridad ministerial, donde se determinará su situación jurídica. Mientras tanto, la unidad y el combustible quedaron asegurados como parte de la investigación.
El caso revela que, pese al discurso oficial sobre el combate al robo de combustible, el trasiego ilegal de hidrocarburos continúa operando con rutas bien establecidas y operadores logísticos que, como en el caso de Roberto N., son solo piezas visibles de un engranaje mucho más amplio.
Huauchinango, enclavado en una región históricamente golpeada por el huachicol, se mantiene como un punto rojo en el mapa nacional del tráfico de combustibles. A pesar de los operativos esporádicos, la cadena de impunidad parece inquebrantable: por cada tráiler detenido, varios más cruzan libremente las carreteras con carga ilícita bajo la sombra de la omisión o la complicidad.