Cuetzalan sin ley con Óscar Paula Cruz: asesinan al periodista Salomón Ordóñez en medio de un repunte del 40% en delitos.
En Cuetzalan del Progreso, la violencia no sólo golpea la tranquilidad de un Pueblo Mágico, sino que exhibe la fragilidad de un gobierno municipal rebasado. La noche del 23 de junio, el periodista regional Salomón Ordóñez Miranda, conocido como El Comunicador del Pueblo, fue asesinado a sangre fría con dos disparos. Su ejecución no es un hecho aislado: ocurre en un contexto de repunte alarmante en la incidencia delictiva durante los primeros cinco meses del 2025, bajo la gestión del presidente municipal Óscar Paula Cruz, del Partido Verde Ecologista de México.
Seguridad fuera de control: 40% más delitos que con Gerson Calixto
De acuerdo con datos oficiales de la Fiscalía General del Estado, entre enero y mayo de este año, los delitos en Cuetzalan se incrementaron un 40% respecto al mismo periodo de 2024, cuando gobernaba el priista Gerson Calixto Dattoli. Con estas cifras, Óscar Paula no sólo ha demostrado ser incapaz de garantizar la seguridad pública, sino que ha resultado incluso peor que su antecesor.
Los números son elocuentes:
-
26 denuncias por lesiones dolosas, la mayoría ocurridas en abril (7 casos) y marzo (6). En enero se registraron 3, en febrero 4 y en mayo nuevamente 6.
-
42 denuncias por violencia familiar, con un pico en febrero (14), seguido por enero (9), mayo (7), marzo y abril (6 cada mes).
-
16 denuncias por amenazas, además de
-
4 casos de abuso sexual,
-
1 denuncia por violencia equiparada, y
-
13 robos en distintas modalidades, incluyendo uno a casa habitación y uno de motocicleta.
Paradójicamente, el registro oficial sólo contempla un homicidio en estos cinco meses, catalogado como culposo por accidente de tránsito. Pero el asesinato de Salomón Ordóñez, cometido con violencia directa y deliberada, desmiente de forma brutal cualquier intento de maquillar las cifras.
Óscar Paula: poder reciclado, crisis repetida
Óscar Paula Cruz no es nuevo en el cargo. Fue alcalde de Cuetzalan entre 2014 y 2018, y antes ocupó el cargo de secretario del Ayuntamiento (2011-2014). Su regreso en 2024 fue presentado como una oportunidad de “experiencia y continuidad”, pero la realidad ha sido una regresión. Su trayectoria está manchada desde 2013, cuando fue denunciado por rebasar por más de veinte veces los topes de campaña: gastó 2.6 millones de pesos cuando el límite legal era de 129 mil. Aunque la impugnación fue presentada ante el Tribunal Electoral, el caso se esfumó en la impunidad.
Hoy, con su regreso al poder, Cuetzalan enfrenta una crisis de seguridad que ha alcanzado su punto más crítico con el asesinato de un periodista.
El asesinato que estremeció al Congreso
Salomón Ordóñez fue atacado la noche del 23 de junio en la calle Privada 15 de Mayo, en la localidad de Pahpatapan. El agresor disparó a quemarropa y huyó del lugar. Testigos aseguran que los servicios de emergencia tardaron más de una hora en llegar; fue el padre del periodista quien intentó mantenerlo con vida.
La reacción del gobierno municipal fue tardía y tibia. Mientras tanto, la noticia escaló a nivel nacional: en la Cámara de Diputados se guardó un minuto de silencio, mientras que colectivos como el CONAPA (Colectivo Nacional Alerta Temprana de Periodistas y Activistas) exigieron que la FEADLE atraiga el caso e investigue tanto a los autores materiales como intelectuales. También solicitaron protección inmediata para la familia del periodista.
¿Quién gobierna Cuetzalan?
La pregunta empieza a tomar otro cariz. No se trata sólo de quién ocupa el cargo, sino de quién garantiza el derecho a la vida, la seguridad y la libertad de expresión en una región olvidada por el Estado. Cuetzalan vive hoy entre el miedo, el silencio y la simulación institucional.
.webp)
.jpeg)
.jpeg)
