A vecinos y conocidos de la colonia Santa Cruz Los Ángeles, de la ciudad de Puebla, aún les cuesta trabajo comprende el por qué, la inocente criatura fue víctima de la violencia física y sexual bajo la custodia de su madre y que había mentido para proteger al agresor.
Debido a que el proceso en contra de Daniela y Víctor está detenido desde hace meses, los presuntos inculpados presumen que pronto saldrán de la prisión, por lo que, ahora estaría en riesgo la integridad de la hermana de Alisson.
En su momento, se supo que la Fiscalía General del Estado (FGE) tenía la carpeta de investigación con pruebas suficientes para demostrar que Daniela y Víctor son los responsables del feminicidio de Alisson, de ahí que se exige justicia para la menor.
Sin embargo existe sobrada desconfianza en la FGE, quien ha demostrado falta de interés en la integración y consignación de expedientes, con el tortuguismo sobrado del Poder Judicial.
La FGE poblana aparece entre las siete con menor probabilidad de esclarecer un hecho delictivo y una de las tres que más demora en tramitar las denuncias.
De acuerdo con el Índice nacional, sólo en el 5.1 por ciento de los delitos denunciados en Puebla se inicia una investigación, y de esta cifra, el 8.3 por ciento tiene una indagatoria efectiva, por lo que la probabilidad de denuncia y esclarecimiento queda en el 0.42 por ciento de los casos, es decir, en uno de cada 238.
Este indicador ubica a la entidad como la séptima con menos efectividad en sus investigaciones ministeriales. Cabe señalar que a nivel nacional la probabilidad de esclarecimiento de un delito denunciado es del 0.90 por ciento, más del doble de lo ubicado en Puebla.
En cuanto al caso que nos ocupa, la audiencia intermedia se ha diferido porque los imputados cambiaron de defensor y luego buscaron el procedimiento abreviado, pero por el momento no hay una fecha tentativa para el desahogo de la audiencia.
Los hechos
El 24 de marzo de 2020 Daniela solicitó una ambulancia porque supuestamente su hija se lastimó al caer de la cama. Alisson Gabriela fue trasladada al Hospital Universitario, pero debido a la gravedad de sus lesiones murió.
El personal médico se percató de que la niña tenía huellas de violencia física, estaba desnutrida y una caída de la cama no pudo haberle provocado traumatismo abdominal.
Por ello solicitaron la presencia del Agente del Ministerio Público y mediante la necropsia se descubrió que Alisson tenía lesiones en su vagina, ano, cabeza, cuello, tórax, brazos, abdomen, espalda y glúteo izquierdo. La menor no se cayó de la cama, sino que fue asesinada a golpes.
Tanto la mamá como el padrastro fueron detenidos y presentados ante el Juez de Control, que los vinculó a proceso por feminicidio, desde ese entonces no hay más avances. El año pasado un grupo de mujeres realizó una protesta frente a la FGE para exigir justicia por la menor.
En Puebla, durante los primeros tres meses del año han asesinado a más de 20 mujeres, dos de ellas menores de 15 años.
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