Sobre los pasos del ‘Mencho’: operadores clave del CJNG y su red de control en México y el extranjero
A más de una década de haber sido acusado formalmente por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, continúa siendo uno de los hombres más buscados del mundo. La recompensa por su captura asciende actualmente a 15 millones de dólares, en una de las persecuciones más prolongadas y costosas de la historia moderna del combate al narcotráfico.
Líder indiscutible del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), El Mencho no solo ha logrado eludir a las agencias de inteligencia mexicanas y estadounidenses, sino que ha construido una estructura criminal sólida, descentralizada y altamente violenta, con presencia en más de 25 estados de la República mexicana, así como ramificaciones en Centroamérica, Sudamérica, Europa y Asia.
El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos dio a conocer este 18 de junio un mapa actualizado de operadores clave del CJNG y sus respectivas funciones dentro de la maquinaria del crimen. A través de sus designaciones bajo la Ley Kingpin, Washington busca congelar activos, limitar sus operaciones internacionales y presionar políticamente al Estado mexicano para intensificar su persecución.
El Cártel como franquicia: estructura y control
Lejos de la lógica vertical de los antiguos capos, El Mencho adoptó un modelo híbrido: dirige el CJNG como una especie de franquicia criminal. Cada territorio opera bajo una especie de "código de marca", pero goza de relativa autonomía operativa, lo cual le ha permitido sobrevivir a la captura o muerte de varios jefes regionales sin fracturas mayores.
Este sistema se sostiene a través de una estructura que incluye áreas especializadas en logística, operaciones paramilitares, propaganda, finanzas, inteligencia y relaciones internacionales. A continuación, un repaso de sus principales operadores:
Julio Alberto Castillo Rodríguez
Castillo Rodríguez ha sido clave en la importación de precursores químicos desde Asia, especialmente desde China e India, a través del puerto de Manzanillo. Su control de la aduana y de empresas fachada ha permitido al CJNG consolidarse como uno de los mayores productores de fentanilo, el opioide que ha provocado una crisis de salud pública en Estados Unidos.
Gonzalo Mendoza Gaytán
Operador estratégico, Mendoza Gaytán ha sido identificado como el responsable del reclutamiento de menores de edad y migrantes para entrenarlos como sicarios. Se le vincula con el rancho Izaguirre, utilizado como centro de adiestramiento. Ha sido acusado de coordinar masacres en municipios clave como Aguililla y Tepalcatepec.
Audias Flores Silva
El Jardinero no solo administra vastos territorios; también ha sido señalado como el responsable de entablar contactos con otras organizaciones criminales, incluidos Los Chapitos, en lo que podrían ser intentos de treguas tácticas. Se le atribuye el despliegue de comandos armados con alto entrenamiento en áreas rurales para consolidar rutas del Pacífico.
Ricardo Ruiz Velasco
Ruiz Velasco es uno de los operadores más peligrosos del CJNG. Encabeza las “Fuerzas Especiales Mencho”, una célula paramilitar que ha ejecutado ataques de alto impacto, como el emboscamiento de convoyes de la Guardia Nacional y el asesinato de funcionarios estatales. También es el encargado de la propaganda armada, difundiendo videos donde muestran armamento de grado militar, blindados y uniformes estilo militar para infundir terror.
Las sombras del CJNG en América Latina y más allá
El CJNG ha expandido su red de distribución y lavado de dinero más allá de México. Ha sido vinculado con células operativas en Guatemala, Colombia, Perú, España y los Países Bajos. En Estados Unidos, sus corredores logísticos atraviesan California, Texas, Illinois y Georgia, según reportes de la DEA.
Las rutas del CJNG abarcan lo mismo narcotúneles en la frontera de Tijuana, que envíos marítimos camuflados en contenedores legales. Recientemente, un túnel de más de 600 metros de profundidad fue hallado entre Tijuana y San Diego, diseñado exclusivamente para mover fentanilo y armas.
Un monstruo en expansión
A diferencia de otros cárteles que se desmoronaron tras la caída de sus líderes, el CJNG ha demostrado una capacidad adaptativa aterradora. Su capacidad para infiltrar instituciones locales, reclutar perfiles técnicos y generar violencia extrema como medio de control, lo han convertido en una amenaza nacional.
La persecución del Mencho continúa, pero mientras su estructura permanezca activa, el CJNG seguirá representando uno de los desafíos más graves a la seguridad, la gobernabilidad y el Estado de derecho en México.
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