Principales deudores El municipio de Huauchinango, ubicado en la Sierra Norte de Puebla, es el principal deudor, con un pasivo de 17 millones 812 mil 124 pesos. Esta deuda comenzó a acumularse en 2009, durante el primer periodo de gobierno de Rogelio López Ángulo, tras la desaparición de Luz y Fuerza del Centro. Aunque para 2021 el monto ascendía a 133 millones 700 mil pesos, la cantidad ha ido disminuyendo a lo largo de las administraciones, pero aún persiste. López Ángulo, quien ha ejercido el cargo de alcalde en tres periodos distintos, no ha logrado saldar esta deuda completamente.
Otros municipios en deuda Ahuazotepec sigue en la lista con una deuda de 16 millones 650 mil 486 pesos, mientras que Eloxochitlán adeuda 7 millones 567 mil 376 pesos, y Juan Galindo, 2 millones 960 mil 19 pesos. Estos montos se remontan a distintas administraciones que, desde 2009, dejaron cuentas pendientes con la CFE.
El 3% de la deuda total se distribuye entre otros municipios como Francisco Z. Mena, Huitzilan de Serdán, Chiconcuautla, San Sebastián Tlacotepec, Tepeyahualco, Atlixco, Tehuacán, Olíntla y Coronango, entre otros. En muchos casos, estas deudas han estado presentes durante más de una década, reflejando un patrón de deficiencias en la gestión de recursos y falta de pago por parte de las administraciones municipales.
Deudas recientes En el último trienio, ocho municipios acumularon una deuda conjunta de 8 millones 574 mil pesos. La administración de Eloxochitlán, encabezada por Delfino Hernández Hernández de 2021 a 2024, dejó la mayor deuda de 7 millones 567 mil pesos. Otros municipios con deudas más pequeñas incluyen a Francisco Z. Mena con 258 mil 357 pesos y Naupan con 84 mil 100 pesos, entre otros.
Impacto legal y financiero Este tipo de deudas tiene implicaciones legales bajo la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios, que estipula la responsabilidad de los gobiernos municipales de gestionar adecuadamente sus finanzas y cumplir con las obligaciones contraídas. La acumulación de deudas con la CFE no solo refleja un manejo ineficiente de los recursos, sino que también puede llevar a sanciones y a la interrupción del suministro eléctrico, afectando la calidad de vida de los ciudadanos y la operatividad de los servicios públicos.
El hecho de que las administraciones municipales no logren saldar sus deudas con la CFE pone de manifiesto la necesidad de políticas de gestión financiera más rigurosas y de mecanismos de rendición de cuentas más efectivos para evitar que estas situaciones se repitan en el futuro. 04-11-2024
