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Arrieros Somos…Carta de entrega-recepción

 Arrieros Somos…Carta de entrega-recepción


 Lo puestos públicos son efímeros, pero las decisiones y acciones que se toman trascienden al tiempo.

 Horacio Cano

Todo quien en algún momento de su vida profesional haya estado inmiscuido en una entrega – recepción de una administración pública puede entender lo que implica, sobre todo si el cargo lo desempeñas con pasión y entrega. En mi caso a partir del 14 de octubre dejaré la Sindicatura Municipal en San Martín. Puede haber muchos sentimientos, la nostalgia del paso del tiempo o también la satisfacción del deber cumplido en el encargo. Es un buen momento para agradecer todo lo aprendido, profesionalmente y sobre todo personalmente. La oportunidad de servir a la ciudad desde un cargo de elección popular es una etapa de mi vida que siempre atesoraré.

 Dicen que en el trabajo no se hacen amigos, en lo personal, durante mi vida profesional he hecho grandes amistades. He tenido la fortuna de tener buenos jefes a los que les he aprendido mucho, con todos llevo una gran relación, muchos siguen siendo mis consejeros y siempre les guardaré mucho respeto, pero sobre todo admiración. ¡Saludos Lupita!...Por ejemplo.

 Equipo de Sindicatura: Gera y todos los abogados que me acompañaron. ¡Muchas Gracias! ¡Lo logramos! Pasaremos a la historia como los que dimos solución a los predios de San Damián y del Tianguis. Por primera vez en muchos años el presidente no tendrá el temor de ser destituido por la corte (caso tianguis)  o que ejecuten un lanzamiento en contra del Ayuntamiento en la Unidad Deportiva, el Auditorio y la Comisaría de Seguridad (caso San Damián). Dejamos los asuntos en orden y con una mejor perspectiva que hace 3 o 6 años.

 Debo decir que durante el tiempo que he podido servir a San Martín desde la administración pública municipal, he tenido la oportunidad de convivir, pero sobre todo de aprender de grandes servidores públicos y todavía mejores personas. Mención especial para Lorena Migoya quien me invitó a trabajar en Texmelucan, fue mi jefa en un inicio (nunca lo dejó de ser) y es una funcionaria pública ejemplar, con una mano izquierda que difícilmente se ve en la administración pública. No tengo más que agradecerle su invitación, después su acompañamiento y siempre, su consejo oportuno en muchos momentos, buenos y malos; así son los amigos.

 Que decir de Javier Pérez. ¡Que bárbaro!  Un tipo dedicado a su trabajo, con carácter cuando había que demostrarlo, con una gran experiencia, mucho conocimiento y gran prudencia. ¡Cuanto le he aprendido!, gracias Javier. Y así podría continuar mencionando nombres de grandes personas que me topé en el camino. No me gustaría dejar fuera a alguno… Enrique, Gonzo, Luis, en fin, necesito más espacio para poder describir lo aprendido de ustedes.

 Nunca dejaré de decirlo: gracias a mi esposa y a mis hijos, han sido el motor de este hombre que desde sus encargos siempre buscó, busca y buscará el bien común…

 

 

COMENTARIO AL AIRE

 Siempre he dicho que lo que viene conviene. En la vida hay etapas, de todas hay que aprender. Se cierran puertas pero siempre hay que estar listos para las ventanas que se abren, pues son retos que te permiten hacer amigos, aprender y crecer como persona. El resentimiento no es buen consejero, ni es bueno para la salud, hay que procurar no transmitirlo a la vida pública, pues puede provocar una pandemia de discordia. Arrieros somos y en el camino andamos…