Controversia por Gastos
Millonarios del Ayuntamiento de Puebla en Septiembre
Puebla, México – 11 de octubre de
2025,
El Ayuntamiento de Puebla
enfrenta críticas tras revelarse que durante el mes de septiembre incurrió en
gastos extraordinarios que ascienden a 45.4 millones de pesos, destinados
principalmente a papelería, renta de patrullas, conservación de inmuebles y comunicación.
Esta cifra, que supera significativamente los montos registrados en meses
anteriores, ha desatado un debate entre los regidores, quienes cuestionan la
transparencia y la justificación de estos desembolsos. El tema ha generado
tensiones en el seno del Cabildo, destacando discrepancias sobre la gestión
financiera municipal y la necesidad de una fiscalización más rigurosa.
Detalle de los Gastos Excesivos
Detectados
Entre los rubros más
cuestionados, los regidores identificaron un desembolso de 3.2 millones de
pesos en papelería durante septiembre, un monto que contrasta con los 3.3
millones acumulados de enero a agosto, lo que sugiere un incremento
desproporcionado en un solo mes. Asimismo, se reportó una inversión de 3.5
millones de pesos en equipo tecnológico, superando los 3.4 millones gastados en
los primeros ocho meses del año, mientras que la adquisición de equipo de
protección para funcionarios alcanzó los 7.2 millones de pesos, frente a los
4.3 millones del periodo anterior. Estos incrementos han sido señalados como
irregulares, especialmente en un contexto donde los recursos municipales deben
priorizarse para atender necesidades públicas más urgentes, como infraestructura
y servicios básicos.
Anomalías en la Compra de
Utensilios de Cocina
Otro punto de controversia radica
en la compra de platos y utensilios de cocina por parte del Ayuntamiento, una
práctica que contravendría el Código Reglamentario Municipal, el cual prohíbe
este tipo de adquisiciones por considerarse gastos no esenciales. Esta decisión
ha sido calificada como un desvío de recursos, ya que los fondos destinados a
este fin podrían haberse destinado a áreas críticas como salud o educación. La
regidora Esther Ortiz Pérez, de Movimiento Ciudadano, ha sido una de las voces
más críticas, argumentando que tales erogaciones reflejan una falta de
planeación y un manejo poco responsable de las finanzas públicas, lo que ha
intensificado las demandas de una auditoría detallada para esclarecer el
propósito de estas compras.
Aprobación de Estados Financieros
por Regidores de Morena
Durante la sesión de la Comisión
de Patrimonio y Hacienda celebrada este viernes, los estados financieros
correspondientes a septiembre fueron presentados y aprobados por los tres
regidores de Morena: Leobardo Rodríguez Juárez, Francisco Ayala Gutiérrez y
Gabriel Biestro Medinilla. Esta decisión ha generado malestar entre los
opositores, quienes consideran que la aprobación apresurada obvia las anomalías
detectadas, dejando sin respuesta preguntas clave sobre la legitimidad de los
gastos. La votación, realizada sin mayores debates, ha sido vista como un
respaldo político a la administración municipal, lo que podría complicar las
revisiones futuras y alimentar las sospechas de opacidad en el manejo de los
recursos.
Críticas por la Ausencia de
Explicaciones del Secretario de Administración
La discusión en la comisión se
vio marcada por la ausencia del secretario de Administración, José Juan Tapia
González, quien no pudo asistir para justificar los gastos excesivos señalados
por los regidores. Esta falta de claridad ha sido lamentada especialmente por
el regidor panista Carlos Montiel Solana, quien destacó que la ausencia del
funcionario impidió un diálogo constructivo y dejó sin respuesta interrogantes
sobre la necesidad de los desembolsos millonarios. La falta de rendición de
cuentas ha intensificado las tensiones en el Cabildo, con algunos miembros
exigiendo una comparecencia formal para que se expliquen los criterios que
sustentan estas erogaciones y se detallen las partidas específicas afectadas.
Análisis Específico de los Rubros
de Gasto
Entre los gastos más destacados,
la renta de patrullas representó un desembolso mensual de 14 millones de pesos,
una cifra que ha llevado a la regidora Esther Ortiz Pérez a proponer la compra
directa de estos vehículos como una alternativa más económica a largo plazo.
Además, se identificó un pago de 1.3 millones de pesos por creatividad y
producción de publicidad, un rubro que no había sido contratado previamente y
que ha levantado sospechas sobre su oportunidad y utilidad. Estos datos
refuerzan las críticas sobre la priorización de gastos, sugiriendo que el
Ayuntamiento podría estar destinando recursos a iniciativas secundarias en
detrimento de necesidades inmediatas de la población, como la mejora de la
seguridad pública y la atención a sectores vulnerables.
Respuesta del Tesorero Municipal
y Próximos Pasos
El tesorero municipal, Héctor
González Cobián, defendió el gasto en papelería argumentando que el elevado
monto se debió a la reposición de material agotado, una explicación que no ha
convencido a todos los regidores, quienes consideran que debió haber un mejor
control de inventarios para evitar este tipo de incrementos. A pesar de las
críticas, los estados financieros aprobados en la comisión pasarán ahora al
pleno del Cabildo para su análisis y ratificación definitiva, un proceso que
promete ser controvertido dado el clima de desconfianza actual. Esta etapa será
crucial para determinar si se implementan medidas correctivas o si las
anomalías detectadas quedarán sin sanción, afectando la percepción de
transparencia en la administración municipal.
Llamado a la Transparencia y
Fiscalización
El debate en torno a estos gastos
ha puesto en el centro de la discusión la necesidad de mayor transparencia y
fiscalización en el manejo de los recursos públicos del Ayuntamiento de Puebla.
Los regidores opositores han insistido en la importancia de auditar cada
partida para evitar el mal uso de fondos y garantizar que las inversiones
beneficien directamente a la ciudadanía. La presión social y política podría
llevar a una revisión más exhaustiva, especialmente si los ciudadanos exigen fiscalización
a través de manifestaciones o denuncias formales. Este episodio subraya los
retos de la gobernanza local en un contexto de recursos limitados y
expectativas altas, marcando un punto de inflexión en la supervisión de las
finanzas municipales.