Infierno en la Cuacnopalan-Cuapiaxtla: sicarios roban tráiler y despojan a familia en minutos
Por José Herrera | 25 de junio de 2025
La tarde de este miércoles, el tramo carretero Cuacnopalan-Cuapiaxtla, entre los municipios de Soltepec y El Seco, se convirtió en zona de guerra. Un comando de al menos cuatro sujetos armados, vestidos con ropa táctica, chalecos antibalas y capuchas, interceptó un tráiler cargado con mercancía electrónica, y minutos después asaltó a una familia entera que transitaba en una camioneta particular.
Los hechos ocurrieron a la altura del kilómetro 57, en uno de los tramos más vulnerables del centro del país, donde el crimen organizado ha impuesto su ley al amparo de la ausencia institucional.
Según testimonios de transportistas y alertas difundidas en redes, los delincuentes viajaban en una camioneta blanca tipo Ranger. Su primer blanco fue un tráiler Freightliner con caja seca, cargado con equipos electrónicos de una cadena comercial. El conductor fue encañonado y despojado de la unidad, que hasta el momento permanece desaparecida.
Bloqueo criminal: trampa mortal sobre ruedas
Después del primer atraco, los agresores atravesaron otro tráiler sobre la carretera para bloquear el paso de vehículos, una técnica de emboscada cada vez más común en rutas de alto valor logístico. En ese instante, interceptaron a una familia que viajaba por la zona, a quienes les quitaron todas sus pertenencias mientras los apuntaban con armas largas.
En fotografías tomadas por testigos y difundidas en grupos de mensajería, se observa a los familiares caminando desconcertados sobre el asfalto, con sus pertenencias arrebatadas y sin apoyo inmediato de autoridades.
Zona roja, impunidad negra
La Cuacnopalan-Cuapiaxtla, corredor clave que conecta Puebla con Tlaxcala, Veracruz y Oaxaca, ha sido escenario de múltiples robos, secuestros exprés y ataques a transportistas. Pese a las denuncias del gremio, las autoridades estatales y federales no han logrado garantizar la seguridad mínima en esta vía, que se ha convertido en una ruta del terror.
Hasta el cierre de esta edición, ninguna autoridad ha emitido un comunicado oficial, ni se ha confirmado si hubo operativos de búsqueda o reforzamiento policial en la zona.
Mientras tanto, el gremio transportista vuelve a operar con miedo, y las familias que cruzan por esta autopista ya saben que en esos kilómetros, la única ley que rige es la del fusil y el sigilo criminal.