Cabeza logo

header ads

GeneraciĆ³n Z pierde facultades

Aprendizaje adaptado a mutaciones
Para Olivier HoudĆ©, Director del laboratorio de psicologĆ­a del desarrollo y educaciĆ³n infantil del CNRS-La Sorbonne y autor del libro "Aprender a resistir",  la GeneraciĆ³n Z que ha crecido con los videojuegos y los telĆ©fonos mĆ³viles, ha ganado aptitudes cerebrales en lo que se refiere a la velocidad y los automatismos, en detrimento de otras como el razonamiento y el autocontrol, y preconiza un aprendizaje adaptado a estas mutaciones.


AĆŗn cuando el cerebro es el mismo, pero los circuitos utilizados cambian. Frente a las pantallas y en la vida en general, los nativos digitales tienen una especie de tren de alta velocidad cerebral que va del ojo al pulgar. Utilizan sobre todo una zona del cerebro, el cĆ³rtex prefrontal, para mejorar esa rapidez de decisiĆ³n y de adaptaciĆ³n multitarea, ligadas a las emociones. Pero esto se hace en detrimento de otra funciĆ³n de esta zona, mĆ”s lenta, de distanciamiento, de sĆ­ntesis personal y de resistencia cognitiva".

"Hay tres sistemas en el cerebro humano. Uno es rĆ”pido, automĆ”tico e intuitivo, altamente requerido en el uso de pantallas. El otro es mĆ”s lento, lĆ³gico y reflexivo. Un tercer sistema en el cĆ³rtex prefrontal permite arbitrar entre los dos primeros: el corazĆ³n de la inteligencia. Permite inhibir los automatismos del pensamiento cuando se hace necesaria la aplicaciĆ³n de la lĆ³gica o de la moral. Es la resistencia cognitiva. Inhibir, es resistir. Los nativos digitales deben reaprender a resistir para pensar mejor".
"Es un proceso de adaptaciĆ³n notable, de toma de distancia que permite resistir a las respuestas impulsivas. Pero la maduraciĆ³n de este proceso es lenta en el curso del desarrollo del niƱo y del adolescente. Es por eso que hay que educarlo y entrenarlo intensamente en el colegio. Es lo que yo llamo 'aprender a resistir', una pedagogĆ­a del control cognitivo. Nosotros lo hemos demostrado en el laboratorio, pero aĆŗn falta por demostrar sus aplicaciones en la escuela. Es Ćŗtil para el razonamiento, la categorizaciĆ³n pero tambiĆ©n la lectura o las matemĆ”ticas".

"Permite, por ejemplo, evitar decisiones absurdas, a veces de manera colectiva, en una empresa. Permite tambiĆ©n resistir, en nuestras democracias, a las creencias errĆ³neas: las teorĆ­as del complot, por ejemplo, o estereotipos muy anclados. Y la resistencia cognitiva es tambiĆ©n un factor de tolerancia. Permite la inteligencia interpersonal, es decir, la capacidad de callar su propio punto de vista para favorecer el del otro. Cuando los atentados de ParĆ­s llevan a hablar de 'desradicalizaciĆ³n', de lo que se trata es de esa resistencia cognitiva. Educar el cerebro es enseƱarle a resistir a su propia sinrazĆ³n. Un verdadero desafĆ­o para las ciencias cognitivas y para la sociedad actual".