SOLO PARA TUS OJOS
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SAINETE
Alfred Nobel firmó su testamento, el 27 de noviembre de 1985, en la ciudad de París; en el cual legaba la mayor parte de una de las fortunas privadas más grande del mundo de la época, a la Fundación Nobel , encargada de entregar, los intereses y dividendos de sus inversiones, constituidos en un Fondo; a cinco Premios Nobel, 4 de ellos otorgados por el gobierno de Suecia y uno por un comité designado por el Storting (parlamento) Noruego.
Este último premio, es el famoso Premio Nobel de la Paz, que debería otorgarse “A LA PERSONA QUE HAYA HECHO EL MAYOR O EL MEJOR TRABAJO POR LA FRATERNIDAD ENTRE LAS NACIONES Y LA ABOLICIÓN O REDUCCIÓN DE LOS EJÉRCITOS PERMANENTES Y LA FORMACIÓN Y DIFUSIÓN DE CONGRESOS DE PAZ” en los términos, textuales, de dicha donación.
Como cada año en la misma fecha, 10 de diciembre, (aniversario luctuoso de Alfred Nobel) el premio es entregado en el Ayuntamiento de la Ciudad de Oslo; aunque de hecho, su anuncio se produce en el mes de octubre de cada año. La expectación que causa su anuncio, casi siempre, ha resultado más relevante que la entrega misma en diciembre.
A partir de 1901, el Premio Nobel de la Paz, ha sido otorgado a personas que más o menos se ajustan a lo prescrito por su fundador, pero no pocas veces, el premiado ha realizado exactamente lo contrario a lo establecido en el famoso legado. Precisamente, dicho en términos llanos, el diablo metió la cola cuando en 1906, dicho premio se le otorgo al presidente norteamericano Theodore Roosevelt creador de dos cosas fundamentales: la política del “gran garrote” para resolver los asuntos diplomáticos norteamericanos en general y el “injerencismo” norteamericano en particular para el caso de Latinoamérica.
Y de allí para el real. En 1919, se le otorgó a Woodrow Wilson, otro presidente norteamericano primero, apóstol de la paz y de la neutralidad, y posteriormente ferviente intervencionista en Europa y partidario de hacer de su nación el verdadero ganón (como lo fue) de los despojos dejados por la 1ª. Guerra Mundial. En 1925, a Charles Gates Dawes, Vicepresidente de Estados Unidos, banquero promotor del gran negocio, de hacer que Alemania pagara las gigantescas reparaciones exigidas por los aliados, mediante un astuto plan de pagos, y HACER QUE ESTADOS UNIDOS LE PRESTARAN A ALEMANIA EL DINERO, con intereses por supuesto PARA PAGARLAS. En 1945, se le otorgó al agresivo Secretario de Estado norteamericano Cordell Hull, que desempeño con eficacia, la tarea de apretar las tuercas al gobierno mexicano para lograr el pago de las indemnizaciones a las petroleras afectadas en 1938;
En 1953 se le otorgó a George C. Marshall, también ex.-secretario de Estado norteamericano, autor del famoso “Plan Marshall” para la reconstrucción de Europa posterior a la 2ª. Guerra Mundial, a cambio del oro Europeo ¡Of course!, y orquestador, como el 15º. Jefe del Estado Mayor del Ejército de los Estados Unidos del lanzamiento de sendas bombas atómicas sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.
En 1973, casi el colmo, se le otorgó a otro secretario de Estado norteamericano, el célebre Henry Kissinger autor comprobado del Golpe de Estado, contra el democráticamente electo Presidente Chileno Salvador Allende; su co-premiado de ese año, el general vietnamita Le Duc Tho, primer asiático en recibirlo, dignamente rechazó el galardón.
El colmo si llegó en 1978 cuando se le concedió a Anwart Al Sadat, presidente de Egipto y promotor y ejecutor principal, en 1973, de la guerra del Yom Kipur y al famoso terrorista israelí Menájem Beguín, autor del recordado atentado al Hotel Rey David que en 1946 destruyó la sede del comando británico en Jerusalén y costó la vida de 91 personas.
En 2009 se le concedió a Barack Obama, entusiasta promotor de bombardeos a personas y ciudades, árabes principalmente, con drones teledirigidos; con lo cual queda muy en claro: Con este premio que se ha otorgado 24 veces a organismos promotores de la paz y en 2º. Lugar a 20 norteamericanos, en muchos de ellos, se premia a los fervientes promotores de los intereses del imperio, y de su intervencionismo e injerencismo, militar o económico.
Y debemos decirlo, los motivos por los que el Comité Nobel de Noruega, dice que lo otorga, siempre han resultado lo de menos en los casos aquí citados. El anuncio de este año, fue de antología, primero aparece en la mayoría de las televisoras del mundo, donde aparece el secretario del Comité Noruego del Nobel en Oslo llamando a María Corina Machado anunciándole la ¿distinción? Al contestar, la aspirante a Venezolana, muy propia contesta el teléfono ¿Hello?
Y tras recibir el anuncio, solo atina a decir, en su lengua “materna” Oh my God!, primero entre dientes, y después con voz más alta
Oh my God!, Oh my God!, Oh my God!, Oh my God! .
https://www.youtube.com/watch?v=lUswqiaOuGg
Acto seguido el Presidente de Estados Unidos Donald Trump, revela que ha recibido una llamada de la “persona que recibió “realmente” el premio Nobel, quien le dijo que “acepto este premio en tu honor porque realmente lo merecías” “un gesto muy amable aunque no le dije que me lo diera” ironizó el presidente y continuó “creo que sí, fue muy amable”
https://www.youtube.com/watch?v=UzIoiBRKtA0.
Es preciso comentar que Trump aspiraba al mismo “Premio”; seguramente bajo el razonamiento de “si con este premio se reconoce a los más intervencionistas de Estados Unidos, pues seré el Presidente más intervencionista y lo obtendré” ¡imaginamos su decepción! En el colmo de los colmos, el Director de Comunicaciones de la Casa Blanca Steven Cheung establece la posición del Gobierno norteamericano: “El comité Nobel demostró que prioriza la política por encima de la paz” ¡! Sic y recontra sic, diría Monsiváis.
https://www.infobae.com/estadosunidos/2025/10/10/la-reaccion-de-la-casa-blanca-tras-el-anuncio-del-premio-nobel-de-la-paz-paramaria-corina-machado/ Cuando este 10 de diciembre de 2025, María Corina Machado reciba el Premio Nobel de la Paz, recibirá alrededor de 11 millones de coronas suecas, es decir, unos 21’560’000 pesos mexicanos, ¡Cómo han subido los precios desde las originales 30 monedas que costaba la traición! ¿Verdad?
Algunas personas, han pretendido comparar a la presidenta de México, con la Premio Nobel de la Paz de este año; pero ¡onde marchante! Claudia es la presidenta electa, legítimamente, de la 13ava economía del mundo; tiene reconocimiento de propios y extraños, con un nivel de aprobación del 80%; con resultados claros no perfectos, en el gobierno y la administración de la República; María Corina, aun con sus millones, y su premio, no pasa de ser considerada una golpista, una traidora a su patria y una pieza más del coloniaje de Estados Unidos.
https://capac-web.org/de-nobel-a-nobel-adolfo-perez-esquivel-destroza-a-corina-machado/
Y por cierto ¡mal pensados! Ya sabemos que hacia Lily Téllez en Estados Unidos, NO ESTABA TRAICIONANDO
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